“Necesito un café”, “hasta que no me tomo un café no soy persona” y “¿te vienes a la máquina de café?” son tres frases que escuchamos (y pronunciamos) con bastante frecuencia en el trabajo. El café es para muchos un compañero más de trabajo, igual que para otros -y, a veces, también para los que necesitan el café para mantenerse despiertos- lo son los refrescos de cola o el té.
Todos ellos son una ayuda para combatir el sueño y el cansancio que vamos acumulando durante la semana o, sin ir más lejos, los que tenemos el mismo lunes por no haber descansado lo suficiente durante el fin de semana. Sin embargo, no todo son ventajas para quienes toman café.
Estas son algunas de las desventajas de tomar café durante tu jornada laboral:
1. Enmascara tu cansancio y tu falta de sueño
El café no cura tu falta de descanso ni tus pocas horas de sueño, sino que únicamente los enmascara. La mejor forma de no tener sueño durante tu jornada laboral es dormir cada noche las horas que realmente necesitas -que no son las mismas para todos- y tener un descanso de calidad.
2. Sube la tensión
Tomar café, sobre todo si se hace en exceso, hace que la presión arterial aumente. Si sometemos cada día a nuestro cuerpo a dosis elevadas de cafeína, podemos desarrollar enfermedades cardiovasculares que pongan en riesgo nuestra salud.
3. Aumenta tu estado de ansiedad
Puede el café no te ponga nervioso realmente o que creas erróneamente que no lo hace cuando en realidad está haciendo crecer tus niveles de estrés o ansiedad.
4. Crea dependencia
La cafeína es una sustancia que no deja de tener un componente adictivo, así que tomar varios cafés cada día en el trabajo y en casa puede crear una dependencia que nos haga creer, como pasa muchas veces, que no somos capaces de tirar si no lo tomamos.
5. Problemas intestinales
El consumo de café, especialmente en elevadas dosis, puede alterar el funcionamiento de nuestro aparato digestivo y producir úlceras y otros problemas intestinales que, además de dañar nuestra salud, nos impidan trabajar con normalidad.
6. Mal aliento
Otra desventaja de tomar café durante tu jornada de laboral es que te deja mal aliento. Y eso es algo que no sólo es una desventaja para ti, sino también para los demás. Eso sí, lo bueno es que este efecto se puede solucionar -aunque no en todos los casos- lavándose los dientes después de tomarlo (mejor así que con un chicle).
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