Los diputados cobran casi 6.000€ en dietas durante sus «vacaciones parlamentarias”

Las vacaciones de Navidad y la escasa actividad al inicio del año hacen que diciembre y enero sean dos meses muy relajados para los diputados y senadores. El ritmo de trabajo, el número de reuniones o de comparecencias ante la prensa disminuye considerablemente, pero no lo que cobran.

En diciembre, nuestros políticos declaran inhábil el primer mes de cada año. ¿Qué significa esto? Que como hay pocas comisiones de trabajo ni hay plenos en el Congreso no están obligados a ir a Madrid a trabajar. Es decir, es como un teletrabajo.

Hasta aquí todo “normal” pero… ¿Qué ocurre con el salario? ¿Cobran más? ¿Menos? Resulta que los diputados de fuera de Madrid cobrarán durante diciembre y enero 5.471,58 euros sólo en concepto de dietas. Mientras, ellos disfrutan de sus vacaciones parlamentarias.

El sueldo de los señores diputados es la suma de las retribuciones, por un lado, y de indemnizaciones, por otro. Estas “indemnizaciones” es lo que comúnmente se llaman dietas, una cuantía destinada para «afrontar los gastos que les origine la actividad de la Cámara». Los 36 diputados electos por Madrid reciben por este concepto 870,56 euros cada mes. Y el resto, los 314 diputados del resto de regiones, cobran 1.823,86 euros mensualmente.

Esta indemnización se cobra también en 14 pagas, es decir, en diciembre también la reciben para pagar el alojamiento en Madrid aun cuando están de vacaciones por Navidad. Por lo tanto, en dietas los diputados de fuera de Madrid cobraron 3.647 euros en diciembre y enero, 1741’12 los de Madrid.

Si a ello le sumamos la correspondiente paga extra de Navidad, sólo en dietas cobraron 5.471,58 euros. A lo que hay que añadir, lógicamente, el resto de retribuciones por su trabajo. El último pleno que se celebró en el Congreso fue el pasado 21 de diciembre y el próximo es a finales de enero.

Casi cuarenta días de vacaciones parlamentarias en las que los diputados han cobrado igual que si fuese un mes normal. Según hemos podido saber, ninguno de los 350 diputados ha rechazado estas dietas. Cabe destacar que el Parlamento no está cerrado y pueden seguir acudiendo a sus despachos y reunirse si lo desean.